Reseña: Egyptian Hip Hop - Good Don’t Sleep
Egyptian Hip Hop empezó su carrera de lo mejor. Lanzó un single llamado “Rad Pitt” que hizo a la industria musical no solo de Inglaterra salir a hablar sino también de aquellos que siguen de cerca las nuevas bandas del mundillo indie. Estos niños engreídos de Manchester –la ciudad donde nació nada menos que Oasis- pasaron de tocar en unos bares con unas decenas de amigos a formar parte del line up de algunos de los festivales más importantes de Europa. Lo mejor de todo es que solo por “Rad Pitt”, que era la más famosa de las cuatro o cinco canciones que lanzaron en su EP, llamado Some Reptiles Grew Wings. Por estos motivos muchos estábamos esperando su primer LP que, realmente, tardó una eternidad en llegar. La agrupación lo puso en streaming la semana pasada para que todos puedan escucharlo de manera gratuita y hoy salió a la venta de manera oficial. Se trata de Good Don’t Sleep.

En el 2009, cuando llegó su primer EP, Nick, Louis, Alex H y Alex P tenían solo 17 años. Eran adolescentes. Hoy, tres años más tarde, ya son mucho más adultos y el sonido de su primera producción de estudio lo demuestra. No significa que por ese motivo deba ser mejor -o peor, claro-. Si hay que resumirlo en unas pocas palabras, su estilo musical se sienta sobre sintetizadores, rock progresivo, sonidos psicodélicos. Todo metido en una licuadora y hecho por chicos que están más cerca de la adolescencia que de la adultez.
El problema no fue que estuvieron componiendo todo este tiempo y trabajando en su música, sino que siguieron caminos diferentes. El cantante, Alex Hewett, hizo un tour psicodélico con el inclasificable Connan Mockasin y la cantante anglofrancesa Charlotte Gainsbourg. Mientras tanto el baterista Alex Pierce, el guitarrista Nick Delap and el bajista Louis Stevenson-Miller trabajaron en lo que, según ellos, son sus propios proyectos.
Finalmente, Good Don’t Sleep llegó y podría ser uno de los discos psicodélicos del año. Tiene muchos sonidos experimentales, otras cosas que quizás se tornan un tanto monótonas y, por ese motivo, aburridas para el oído. Por momentos hay dejos de muchísima calidad musical y composición interesantísima. Algunas de las canciones, como “Tobago”, que abre la producción, poseen sonidos increíblemente frescos. Mucho groove y música que no necesita su paso por la consola de un DJ para ser bailada.
Algunas canciones, como “The White Falls”, parecen que no lograrán sorprendernos y que, más que nada, nos terminarán aburriendo, pero cuando empiezan nos damos cuenta que no es así. Lo mismo sucede con “Pearl Sound”.
Los dos singles fueron perfectamente elegidos. Tanto “Yoro Diallo” como “SYH” son dos tracks de los más pasables y simples que pueden llegar a gustarle a cualquiera independientemente del estilo musical que sigan. Son dos tracksque tranquilamente podrían volverse mainstream y sin duda estarán en todos los tracklists de los shows que dará la banda en los próximos meses.
Sea como sea, hay uno que otra contra que hace que el disco no se haya convertido en una de las posibilidades a ser de los mejores del 2012. Primero que nada la duración de las canciones. Casi ninguna de todas ellas dura menos de 4 minutos. La mayoría se extiende demasiado, tiene líneas que son innecesarias y sonidos que se extienden sin razón aparente. ¿Un ejemplo? “Snake Lane West” dura más de seis minutos y se trata de un track que no le agrega absolutamente nada. En ningún momento logra explotar, en ningún momento hace una demostración de la buena música que saben hacer, en ningún momento pasa nada. Son seis aburridos minutos.


En el 2009, cuando llegó su primer EP, Nick, Louis, Alex H y Alex P tenían solo 17 años. Eran adolescentes. Hoy, tres años más tarde, ya son mucho más adultos y el sonido de su primera producción de estudio lo demuestra. No significa que por ese motivo deba ser mejor -o peor, claro-. Si hay que resumirlo en unas pocas palabras, su estilo musical se sienta sobre sintetizadores, rock progresivo, sonidos psicodélicos. Todo metido en una licuadora y hecho por chicos que están más cerca de la adolescencia que de la adultez.
El problema no fue que estuvieron componiendo todo este tiempo y trabajando en su música, sino que siguieron caminos diferentes. El cantante, Alex Hewett, hizo un tour psicodélico con el inclasificable Connan Mockasin y la cantante anglofrancesa Charlotte Gainsbourg. Mientras tanto el baterista Alex Pierce, el guitarrista Nick Delap and el bajista Louis Stevenson-Miller trabajaron en lo que, según ellos, son sus propios proyectos.
Finalmente, Good Don’t Sleep llegó y podría ser uno de los discos psicodélicos del año. Tiene muchos sonidos experimentales, otras cosas que quizás se tornan un tanto monótonas y, por ese motivo, aburridas para el oído. Por momentos hay dejos de muchísima calidad musical y composición interesantísima. Algunas de las canciones, como “Tobago”, que abre la producción, poseen sonidos increíblemente frescos. Mucho groove y música que no necesita su paso por la consola de un DJ para ser bailada.
Algunas canciones, como “The White Falls”, parecen que no lograrán sorprendernos y que, más que nada, nos terminarán aburriendo, pero cuando empiezan nos damos cuenta que no es así. Lo mismo sucede con “Pearl Sound”.
Los dos singles fueron perfectamente elegidos. Tanto “Yoro Diallo” como “SYH” son dos tracks de los más pasables y simples que pueden llegar a gustarle a cualquiera independientemente del estilo musical que sigan. Son dos tracksque tranquilamente podrían volverse mainstream y sin duda estarán en todos los tracklists de los shows que dará la banda en los próximos meses.
Sea como sea, hay uno que otra contra que hace que el disco no se haya convertido en una de las posibilidades a ser de los mejores del 2012. Primero que nada la duración de las canciones. Casi ninguna de todas ellas dura menos de 4 minutos. La mayoría se extiende demasiado, tiene líneas que son innecesarias y sonidos que se extienden sin razón aparente. ¿Un ejemplo? “Snake Lane West” dura más de seis minutos y se trata de un track que no le agrega absolutamente nada. En ningún momento logra explotar, en ningún momento hace una demostración de la buena música que saben hacer, en ningún momento pasa nada. Son seis aburridos minutos.
7/10
Lo mejor que saben hacer los post adolescentes de Egyptian Hip Hop es, sin lugar a dudas, mezclar el pop, los sintetizadores y esa experimentación, aunque muchas veces se van por las ramas y logran aburrirnos. Sin lugar a dudas el disco vale la pena y hay que escucharlo porque si bien no hay ningún “Rad Pitt” sí hay temas que son lindísimos.- Fecha de lanzamiento: 22/10/2012
- Discográfica: R&S Records
- Compra el disco: Amazon
- Canciones destacadas: “Tobago”, “Yoro Diallo”, “The White Falls”